sábado, 1 de octubre de 2016

Estudio de la calidad del coque metalúrgico

El coque, producto o residuo obtenido de la destilación de algunos carbones, es un sólido poroso y poco denso, que arde sin llama y tiene gran poder calorífico, se emplea principalmente como reductor en la industria siderúrgica para la fabricación de acero.
La calidad del coque es un concepto que no puede definirse en términos precisos. Esta difiere de un estado a otro e incluso dentro de un país. Sin embargo, el coque antes de ser utilizado debe someterse a una serie de pruebas que confirman sus propiedades químicas, físicas y mecánicas
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Características del Coque Metalúrgico


Propiedades Químicas

El análisis inmediato (humedad, cenizas, materias volátiles, carbono fijo) y el análisis elemental (S, C, O2, H2, N2), determinan las propiedades químicas del coque. Estos análisis se realizan de la misma forma que para los carbones teniendo en cuenta las normas establecidas para dicho proceso.

Humedad: La humedad del coque deriva del apagado después de la extracción de las cámaras de coquización y eventualmente de la acción de agentes atmosféricos a que el coque pueda haber sido expuesto durante el almacenamiento. El agua reduce el porcentaje de carbono en el coque y consecuentemente su poder calorífico, proporcionalmente a su cantidad. Por lo anterior bajo el punto de vista económico, el valor del coque disminuye al aumentar el porcentaje de humedad. Bajo el punto de vista metalúrgico, ocurriendo la evaporización del agua en la parte alta del horno antes de llegar a la zona de reacción, el contenido de humedad es de importancia limitada.

La determinación de la humedad del coque se reporta en la prueba normalizada por la ISO 579: donde 1 Kg de coque se pone en una bandeja de aluminio o acero inoxidable, cuyo fondo tenga una extensión de aproximadamente 0.1 m2, luego la muestra se seca a 200 ºC en una estufa, hasta que el alcance un peso constante.

Cenizas: Las cenizas del coque están constituidas por las sustancias minerales preexistentes en el carbón de origen. Las cenizas representan un incombustible inerte, y entonces disminuyen el contenido porcentual de carbono y el poder calorífico del coque. Las cenizas son de naturaleza ácida (contienen aproximadamente 50% de SiO2) y requieren el empleo de un fundente para ser extraídas. Mayores contenidos de cenizas hacen el uso de mayor cantidad de coque para fundir la escoria, el empleo de una mayor cantidad de fundente y la reducción del rendimiento del cubilote.

Azufre: El azufre del coque tiene un efecto muy deletéreo sobre la marcha del horno, pues disminuye los poderes caloríficos y de reducción del coque. Un aumento del contenido de azufre implica un aumento del consumo de coque.

Propiedades termofísicas y termoquímicas

Las propiedades termofísicas y termoquímicas se determinan con los ensayos de poder calorífico, temperatura de fusión de las cenizas y la reactividad del coque.

Poder calorífico: El poder calorífico del coque expresa su valor como combustible y este parámetro depende directamente del porcentaje de carbono fijo presente, el coque a altas temperaturas contiene prácticamente solo carbono fijo y cenizas.

Reactividad: Es la aptitud para reaccionar con el CO2 según la reacción de Boudoir

C + CO2 = 2CO

La reactividad del coque puede ser controlada actuando sobre los parámetros que la influencian; estos factores pueden ser de naturaleza química, física o factores relativos a la condición de coquización. Entre los anteriores factores sobresalen los siguientes: la reactividad del coque aumenta al disminuir la granulometría, pues aumenta la superficie del coque expuesta al CO2 y la reactividad también aumenta cuando la porosidad aumenta pues se incrementa la superficie útil al ataque de los gases oxidantes.

Existen varios métodos para determinar la reactividad:

a) Guerin-Bastier: Consiste en colocar una muestra del coque sobre una termobalanza en una atmosfera de CO2 y registrar la pérdida de peso.

b) Comunidad económica europea: Se coloca una muestra en un tubo de cuarzo; se hace pasar una corriente de CO2 puro. El tubo se coloca en un horno vertical a una temperatura fija. Luego se efectúa un análisis de los gases de reacción.



Propiedades físicas

Se deben tener en cuenta los siguientes parámetros:

Aspecto: Consiste en observar la forma y los colores que dan una indicación aproximada de su calidad. Coque en forma de agujas indica fragilidad; el color debe ser negro, la fractura puede ser brillante o mate y los poros indican el grado de cocción.

Estructura: Si el tamaño y la distribución de los poros es uniforme, la mezcla de carbones es adecuada y su cocción la apropiada. Las grietas presentan la facilidad de fragmentación del coque.

Densidad real: Es la relación entre el peso y el volumen de una unidad de coque sin tener en cuenta los poros. Se determina sobre coque molido. La densidad real es un parámetro que se determina para calcular la porosidad. Hay que tener en cuenta que la densidad absoluta aumenta con el contenido de ceniza.

Densidad aparente: Es la densidad media de los trozos de coque incluyendo los poros en el cómputo de volumen. Se llama también estructural porque da una idea de la compactación del coque. Siendo más alta para coques menos porosos.

Porosidad: Influye en el trabajo del horno. Un coque de buena calidad le corresponde una porosidad moderada. Para calcular la porosidad se compara la densidad real y la aparente del coque. Es muy importante, ya que de ella depende la facilidad con que reacciona con el oxígeno, anhídrido carbónico y el vapor de agua.

Densidad volumétrica: Es la densidad del coque medida en el sitio en que se encuentra, formando montones o dentro de una tolva. Para el cálculo se consideran los espacios vacíos entre trozos. Este parámetro afecta la permeabilidad de la carga en el cubilote.

Resistencia mecánica: La calidad del coque está definida en gran medida por su resistencia mecánica, la cual, se cuantifica generalmente por su dureza Micum. La resistencia mecánica se puede definir como la capacidad del coque para no degradarse cuando se le somete a pruebas de impacto y abrasión a temperatura ambiente o bajo la influencia de elevadas temperaturas. La resistencia mecánica del coque y su influencia en la carburación se explica porque a mayor resistencia del coque, mejor conserva su calibre. Al conservar su calibre, la combustión del coque es menos variable y el aire permanece constante. Además, como la reactividad del coque depende principalmente de su calibre; cuando este aumenta, la reactividad disminuye, lo cual habla de la importancia de trabajar con coques clasificados según el diámetro del cubilote.

Fin del coque para fundición


a) Agente combustible y transmisor de calor
b) Agente de carbono
c) Permeabilizante de la carga
d) Apoyo de la carga.

Normas de calidad del coque para cubilote


Las normas de calidad del coque para cubilote son más severas que las del coque utilizado en alto horno, sea desde el punto de vista de pureza química que del de la resistencia mecánica.

El hierro procedente del alto horno es un material crudo, destinado a ulteriores tratamientos de depuración y afino; el hierro del cubilote, en arrabio, se transforma en piezas coladas que deben tener una composición química bien definida y un contenido de impurezas compreso en límites muy estrictos. Por eso es indispensable que el coque para cubilote tenga una composición mejor de la aceptable para el alto horno.

Las propiedades físicas también tienen que ser mejores. Las condiciones operativas del alto horno permiten el empleo de coque de tamaño relativamente pequeño (20-70 mm), mientras que para el cubilote se exige coque grueso. Con respecto al tamaño, este depende del diámetro del cubilote y se pueden aconsejar las siguientes granulometrías:

a) Coque medio entre 80 y 140 mm, para cubilotes de viento frío, hasta 0,8-0,9 m de diámetro y de viento caliente hasta 1-1,1 m de diámetro.

b) Coque grueso entre 140 y 250 mm para cubilote de grandes dimensiones y aplicaciones particulares.

c) Coque corriente, de tamaño mayor que 80-90 mm, para cubilotes de viento frío de diámetro superior a 0,9 m y de viento caliente de grandes dimensiones.

d) Como combustible del coque, este es mayor si posee un menor contenido de cenizas.

Conclusiones


Una buena calidad del coque, un alto contenido de carbono y un bajo contenido de cenizas, son factores que influencian la carburación. Asimismo, hablando del valor como combustible del coque, este es mayor si posee un menor contenido de cenizas.

La calidad del coque, puede ser establecida a partir de muchas características químicas, fisicoquímicas y físicas; sin embargo, son la resistencia mecánica y el calibre del coque, los factores principales que la determinan.

La humedad del coque es un aspecto de mayor relevancia para el comportamiento térmico del horno, que para su comportamiento metalúrgico.

Se consume más coque, si este presenta un contenido de azufre alto.

La porosidad del coque es preferible que sea moderada, ya que hay que tener en cuenta tanto el aspecto de reactividad, como su resistencia mecánica.

Bibliografía

ALONSO, ARNALDO. Diseño, operación y control del cubilote. Ediciones UIS. Bucaramanga, 2000.


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